lunes, 26 de julio de 2010

Aerógrafo....y eso que es? (Parte II)

El aerógrafo, como había dicho en la anterior entrada, es un aparato sofisticado el cual pulveriza pintura gracias a la presión de aire suministrada por un compresor. Pero el aerógrafo es mucho más que eso, a través del tiempo diversas compañías han logrado dar un paso adelante y han logrado evolucionar el diseño original creando diversas modalidades del mismo. He aquí las más importantes hechas...

Aerógrafo "simple acción"

Los aerógrafos de acción simple, son aquellos en que la pintura y el aire sale al mismo tiempo con una relación aire/pintura constante, es decir, no se puede controlar la cantidad de pintura al mismo tiempo que se esta pintando. Esto normalmente se regula antes de trabajar mediante alguna perilla o tornillo, y si se desea hacer el ancho de pintado todavía mas ancho o mas delgado (Aplicar mas, o menos pintura) tiene que detenerse el pulverizado para poder realizar los ajustes necesarios.
El gatillo tiene unas sola función: permitir la salida de aire, de ahí este tipo de aerógrafos toma su nombre. Al presionar el gatillo permite la salida del aire que forma un vacío sobre el recipiente de la pintura, lo que ocasiona que la pintura sea absorbida, entre al flujo de aire y sea convertida en diminutas gotas (pulverizado). Hay dos tipos principales, mezcla externa o mezcla interna, este último es mejor. Esto se refiere en que parte se hace la mezcla de la pintura con el aire dentro del cuerpo del aerógrafo.

Ventajas: La principal es su facilidad de manejo, por lo que puede ser el más indicado para principiantes ya que no hace falta tanto control. Suele ser mas barato que los de acción doble.
Inconvenientes: No se tiene control sobre la cantidad de pintura al momento de estar trabajando. La mayoría no son aerógrafos de precisión, por lo que las líneas mas delgadas, serán difícil de reproducir.


Dibujo esquemático de un aerógrafo simple acción, específicamente un Paasche modelo H.


Aerógrafo "doble acción"

Este es mas complejo en funcionamiento que el simple acción, el gatillo superior tiene 2 movimientos independientes. Presionando hacia abajo se logra que salga sólo aire. Presionando hacia abajo y hacia atrás se logra la mezcla de aire y pintura. Conforme se deslice el gatillo para atrás se comenzará a suministrar mas pintura al flujo de aire. Es decir, entre mas atrás se mueva el gatillo, más grueso será el chorro de pintura. Es evidente que, si presionamos muy poco hacia atrás saldrá poca pintura y se pintará una línea delgada.




Ventajas: Tenemos mayor control sobre el grosor del pintado ya que podemos empezar un trazo muy fino y acabarlo más grueso sin que pierda intensidad. Con estos aerógrafos se pueden realizar trabajos de un gran nivel, calidad y detalle.
Inconvenientes: Es mas caro que uno de acción sencilla. Hay que tener mucho control sobre él para conseguir trazo deseado. Para un principiante puede ser algo frustrante ver que es necesario un gran dominio, pero no hay que desanimarse, solo es cuestión de práctica.
Dibujo esquemático de un aerógrafo doble acción, específicamente un Paasche modelo TG


Suministro de pintura

Los aerógrafos tienen dos formas de recibir la pintura:


Por gravedad: La pintura se introduce por propia gravedad en el aerógrafo, es una pieza fija (Copa) que va unida a la parte superior del cuerpo del aerógrafo, por lo tanto no podemos quitarla. Ventajas: No se desperdicia pintura, podemos trabajar sin problemas tanto horizontal como verticalmente. Al no tener tubo de unión entre el cuerpo del aerógrafo y del deposito, no se puede obstruir. Inconvenientes: el deposito es fijo, así que tendremos que limpiarlo a la vez que limpiamos el aerógrafo. No podemos intercambiar depósitos y según el modelo de aerógrafo es el único tamaño que podemos utilizar.

Por succión: El depósito esta en la parte inferior del aerógrafo y es una pieza móvil, por lo tanto podemos quitarla. Ventajas: cada vez que se necesitas limpiarlo, basta con desmontarlo y limpiarlo. Con distintos juegos de deposito podemos intercambiarlos y así tener mas opciones a la hora de pintar superficies grandes o pequeños detalles. Inconvenientes: Para los depósitos laterales descubiertos resulta algo complicado pintar sobre una superficie horizontal ya que el depósito queda muy inclinado y se puede llegar a derramar algo de pintura. Varios de ellos tienen un pequeño tubo que une el cuerpo del aerógrafo con el deposito, si se seca la pintura en esa zona se nos puede obstruir.

viernes, 23 de julio de 2010

Aerógrafo....y eso que es?


Si, es la pregunta que todos nos hacemos....que es eso? como se usa?. Estas y muchas me las hice cuando vi por primera vez uno. Inventado en 1893 por el acuarelista americo Charles Burdick es un aparato de precisión, pequeño, parecido a un lápiz grueso, solo que este es mucho mas sofisticado. Es en práctica una pistola de aire, la cual a través de una manguera que le proporciona aire venido de un compresor, pulveriza pintura líquida y suficientemente acuosa para que pueda pasar a través del aparato. El mismo tiene un pulsador o gatillo, el cual podemos ir graduando la cantidad de pintura y/o aire que necesitamos rociar.
Aunque el primer aparato elaborado con grado alto de sofisticación se hizo en 1893, el concepto de pulverización de pintura a traves de aire viene de épocas mucho mas antiguas, cuando el hombre aún viviendo en cavernas, uso pequeñas ramitas huecas (como el bambú) y colocando en ella alguna especie de pigmento (de origen vegetal o mineral probablemente), sopló por unos de los extremos pulverizando el pigmento colocado en el otro. Logro así plasmar en las paredes de las cuevas manos y otras formas (como se ve en la foto de arriba). Curiosamente, al nacer esta técnica de pintura, nació consigo otro recurso muy usado en la aerografía que fue el uso de plantillas.
Pero sólo en la época moderna es que el aerógrafo ha podido evolucionar de manera vertiginosa y se ha transformado en una herramienta exquisita para ilustradores y artistas plásticos que vieron en el su instrumento de dibujo perfecto (me incluyo).

jueves, 22 de julio de 2010

Aerografía: el hiperrealismo en el papel.


Imagen del artista Dru Blair. Reservados todos los derechos del artista.


Quien no recuerda, cuando era mas jóven, aquellas portadas de los discos que tenían cierta sensación de hiperrealismo? o aquellos afiches que colocábamos en nuestro cuarto cuando eramos adolescentes? sabias que era una ilustración, pero te gustaba esos degradeces, colores tan vivos que no parecían reales, y los detalles que lograban que la ilustración fuera mucho más intensa y real...

Eso empezó de una manera cada vez mas intensa a interesarme y preguntarme cómo lograban esas ilustraciones de maravilla, las cuales podias pasar horas y horas viendo.

Fue entonces cuando di con lo que era la aerografía, y no fue que alguna persona me lo dijo, fue un descubrimiento algo fortuito y que dejo en mi una marca inborrable. Mi madre fue la responsable de ese hecho. Como muchos artistas plásticos e ilustradores, casi siempre nuestra fuente de inspiración es un familiar,   nuestros padres o un amigo. Mi madre en aquel entonces estaba en el mundo de la cerámica, sacaba piezas de moldes las cuales pasaba a un horno donde las cocia para que endurecieran y luego proceder a pintarlas. Veía con admiración como pintaba de forma magistral los bizcochos ya listos, pero un día decidió pintarlos de una forma distinta.

En ese momento, fue que conocí el aerógrafo, un extraño aparato que estaba conectado a un compresor que era el que le suministraba el aire comprimido que le ayudaba a pulverizar la pintura para luego esparcirla en la pieza a pintar. Claro, en aquel entonces no deducía todo esto, porque la parte que me maravillaba era cuando salia la pintura...los colores, la viveza de los mismos, la perfección en los degradeces asi como su suavidad.

Ahí empezó todo...